LOS DOS SOLES
Paz y bien hermanos.
Hay personas que viven sumergida en una especie de espejismo. Son de una forma frente a sus familias, de otra frente a sus amigos, de otra en el trabajo y de otra en su propia intimidad. Y la realidad es difícil de saber porque se parecen a los dos soles. El que brilla en el firmamento no esta allí donde se ve y es solo un reflejo del sol real. Y el que brilla en las ventanas, en los lagos, ríos y mares tampoco es porque es un reflejo del que brilla en el firmamento.
¿Eres un espejismo o te conoces a ti mismo y sabes a ciencia cierta quien eres? ¿Eres amable con los de la calle y duro y severo con los de casa? ¿Eres de los cristianos por tus obras y hechos o por tus conocimiento y palabras?
Jesus dijo: “«No todo el que me dice "Señor, Señor" entrará en el reino de los cielos, sino el que cumple la voluntad de mi Padre que está en el cielo” Despertar para ir a trabajar y sostener y cuidar una familia no es suficiente. Ser honrado y tener fe tampoco lo es. Eso esta bien para quien solo ha recibido el bautismo de Juan. Mas quien ha recibido el Espíritu Santo y sale a servir, a entregar de los dones y talentos que le fueron dados, ese es como Jesus nos dice: “El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa sobre roca”
Alimenta tu fe con la palabra de Dios, con la comunión, con tu servicio, con tus oraciones diarias, con el ejemplo y la integridad personal, con el amor y la entrega a quienes Dios ha puesto bajo to responsabilidad.
De ti y de tu fe Jesus entonces dira: “Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y descargaron contra la casa; pero no se hundió, porque estaba cimentada sobre roca”
Delante de ti hay todos los días “Bendición y maldición” escoge la que tu mas quieras
Bendiciones
Mateo (7 21-27)
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